¿Ha vuelto el Arsenal?
El Arsenal quiere soñar despierto. El conjunto Gunner quiere aspirar con argumentos sólidos y razonables para volver de nuevo a la copa de Europa. Y lo hace gracias a una dinámica de resultados muy respetable, muy seria y muy competitiva.
Retrocedamos al mes de agosto. El comienzo de temporada del Arsenal fue tan preocupante como decepcionante, tan inesperado como desconcertante. Tres derrotas en las primeras tres jornadas hicieron que se codearan con el descenso. Parecía la alarma más importante. Tras dejar de pelear por el título, tras dejar de entrar en puestos de Champions League, incluso tras dejar de estar en competiciones europeas, muchos temían que el descenso (por raro que parecía) pudiera ser el siguiente paso en la dinámica descendente.
Sin embargo, llegó el punto de inflexión. El pasado 28 de agosto el Arsenal visitaba el Etihad Stadium para enfrentarse al siempre temible Manchester City de Pep Guardiola. El resultado fue tan preocupante como rotundo. El conjunto londinense recibía un serio correctivo en forma de 5-0 que hizo saltar todas las alarmas de forma seria. No preocupante, ni incendiario, pero el problema ya existía.
Mikel Arteta empezó a ser cuestionado y algunos de los jugadores más importantes del vestuario fueron señalados por su bajón de rendimiento deportivo. Sin embargo, aquel duro golpe, aquella triste tarde en Manchester, provocó el estallido deportivo y la reacción que esperaba la parroquia Gunner del norte de Londres.
La dinámica es rotunda: desde entonces, tres derrotas en 17 partidos. Un total de 12 victorias y dos empates que han dinamitado de forma positiva su situación, su escenario, y han creado un horizonte tan importante, estimulante como ilusionante.
En estos primeros meses de temporada, desde aquella fatídica tarde de verano, han pasado de estar en la zona baja, en la zona caliente, en puestos de descenso, a ser actualmente cuartos en la tabla clasificatoria. Lejos de estar metidos en la batalla por el título, pero opositando seriamente a volver a Europa el próximo curso.
El Arsenal vuelve a estar en puestos de Champions League. Es una realidad incontestable. Objetivamente, la tabla clasificatoria da razones de peso para que los aficionados Gunners sueñen con fuerza, despiertos, con la ilusión de la infancia, con poder volver al torneo en el que un día fueron considerados un fijo año tras año.
No parecen tener la plantilla más mediática de su historia. Quizás tampoco la de más calidad, ni la de mayor número de estrellas. Sin embargo, la juventud de este combinado, la experiencia de un ex-jugador en el banquillo y la reconexión de la grada con el equipo parece que ha instalado una más que interesante realidad para sus intereses.
¿Volverá el Arsenal a disputar la copa de Europa la próxima temporada?