Giacomo Baraggioli nos recomienda un pronóstico para la Ligue 1.
Un enero terrible para el Lorient, último en la clasificación de Francia. Dos derrotas contra Mónaco y Burdeos, y luego la emergencia del Covid que ha segado la plantilla de Christophe Pelissier. En vista de la doble pelea decisiva en clave de salvación contra Nimes y Dijon, el Lorient fue arrollado por la pandemia, veintidós jugadores afectados y parada forzada sin tener suficientes jugadores disponibles para salir al campo. Después de dos aplazamientos, los bretones vuelven al campo en plena emergencia esta noche para la primera recuperación, albergando un Dijon que ha pasado de un buen empate interno contra Estrasburgo. Las noticias alrededor de Lorient son pocas y muy fragmentadas y no está claro cuántos jugadores se han recuperado plenamente de Covid para estar a disposición de Pelissier en este día. Lo que no le faltará al técnico son los atacantes, Wissa, Hamel y Grbic están a disposición así como el centrocampista Monconduit y el defensor Delaplace, el resto de la orgánica es una incógnita. Seguramente ausentes Gravillon, Laurentié y Abergel, muchas dudas permanecen sobre la presencia del portero Nardi. Una formación forzada, forzada por la emergencia, deberá afrontar un desafío importante para la continuación de la temporada. Frente a un Dijon que está demostrando que está en buena forma y viajando está recogiendo puntos pesados. Linares tiene casi todo el personal disponible y mucha confianza. Otro dato que no se debe olvidar son los resultados de los equipos afectados por el Covid en temporada: el 0-5 del Saint Etienne en el derby y el 4-4 del Lens contra el Reims después de haber estado en ventaja de cuatro goles. La precaria condición física podría costarle caro a Lorient.