Ambos equipos vienen de ganar esta semana por el mismo resultado, el Liverpool se impuso por 1-0 al Crystal Palace, mientras que el Hoffenheim ganó por ese mismo resultado al Werder Bremen.
Los Reds cuentan para este partido con la ventaja de jugar en Anfield Road, uno de los campos más difíciles de Europa. Jurgen Klopp tiene la ventaja de contar con un Sadio Mané que está en un estado de forma excepcional, siendo un jugador capaz de desequilibrar cualquier partido.