¿El Valencia en Octavos de la Champions? Es posible.

Defender al Valencia esta temporada es tarea un tanto complicada. Sólo hay que ver objetivamente los datos deportivos que han registrado hasta la fecha los pupilos de Marcelino García Toral para darse cuenta que los resultados no están siendo precisamente positivos.



15 encuentros oficiales disputados entre todos los torneos, de los cuáles sólo 2 se han traducido en victoria. El resto (10 empates, 3 derrotas) se han traducido en tropiezos que han instalado un aura de incerteza sobre Mestalla. Algo inesperado viendo, primero, la plantilla con la que cuentan en sus filas y, segundo, por las posteriores (y lógicas) expectativas que se crearon en torno al proyecto durante el pasado verano.


Sin embargo, hay que seguir analizando objetivamente a un proyecto pobre de resultados pero que, en cambio, no transmite lo mismo en la gran mayoría de ocasiones sobre el césped. Evidentemente, no son el mejor equipo del fútbol europeo ahora mismo. Ni mucho menos. Pero las sensaciones ofrecidas no siempre han sido tan negativas para hablar de ellos como un desastre. El encuentro contra el Girona del pasado sábado, un ejemplo de ello. El Valencia superó los 25 lanzamientos a portería, de los cuáles no entró ninguno, con minutos y tramos del partido realmente positivos y buenos. El Girona, en cambio, tuvo 1-2 ocasiones y la materializó en el 0-1 definitivo. ¿Mala suerte, poco trabajo intersemanal para mejorar la puntería? Que cada uno compre el argumento que le satisfaga.


Pero centrémonos en la Champions League. El torneo más importante del fútbol europeo a nivel de clubes. El Valencia llega a la cuarta jornada tercero en la clasificación con 2 puntos de 9 posibles. Empieza ahora el tramo serio, pasando el ecuador, donde el final está más cerca que el comienzo y donde los tropiezos sí se pagan serios. La primera plaza es una quimera, pura fantasía, pero en Mestalla, objetivamente, tienen más de un motivo real para soñar con la clasificación para Octavos de Final del torneo. 2 empates, 1 derrota, 0 victorias no es precisamente el mejor de los resultados ni la mejor de las dinámicas, pero su gran rival por la segunda plaza no está firmando tampoco una Fase de Grupos excelsa y eso crea un haz de luz para los valencianistas de cara a estas próximas 3 jornadas.



Vayamos al grano. El Valencia tiene 2 puntos, el Manchester United 4. Esta próxima jornada el Valencia recibe en casa al Young Boys en un encuentro que, si se cumple la lógica esperada, deberían ganar, mientras que los ingleses deben visitar el Juventus Stadium en Turín para enfrentarse a la Juventus. Personalmente, no me parece ninguna locura pensar que el Valencia gana al Young Boys y que el Manchester United no gana en Turín. Ya no digo que pierde, sino que tropieza. La Juventus ha demostrado ser un equipo muy superior a los británicos y no es descabellado pensar en un resultado positivo para los italianos. Sería el primer paso favorable para los de Mestalla.



Positivo porque en la última jornada llega el gran duelo, el que marcará el destino de ambos, el que será vital o mortal para las aspiraciones europeas del Valencia. Una auténtica final. El conjunto de Mestalla recibirá en casa, en el coliseo valencianista, al Manchester United, en el duelo que muy problablemente defina la segunda plaza del grupo. Es cierto que en la 5ª jornada los de Marcelino visitan Turín, se enfrentarán a la Juventus en un duelo que presenta al conjunto bianconero como el gran candidato a la victoria. Todo lo que no fuera victoria de la Juventus y triunfo a su vez del Manchester United en casa frente al Young Boys, sería sorpresa. Es decir, si la lógica se cumple, llegaríamos a la última jornada continental en las mismas condiciones que ahora (Manchester United segundo, Valencia tercero). Pero pese a la desventaja valencianista, las opciones reales y matemáticas seguirían existiendo. Todo seguiría en la última jornada como ahora, con una distancia de 2 puntos con 3 en juego.


Entonces entraría el factor Mestalla en juego. El coliseo valencianista debería convertirse en el de las grandes noches, en el estadio que muchos han sufrido en la década y todo adquiría un carácter de final absoluta. Al Valencia sólo le valdría ganar, mientras que el Manchester United podría permitirse un empate en su visita a la capital del Turia. Pero el Valencia podría clasificarse, llegaría a la última jornada con opciones. ¿Complicado ganarle al Manchester United? Seguramente, pero este equipo ha dejado claro en Inglaterra que tiene muchas carencias, que sus encuentros son lineales, escasos de ideas en muchos tramos, y en defensa generan muchas dudas. Sería entonces cuando el Valencia de las grandes noches debería aparecer y entonces todo cobraría otro sentido. 



El Manchester United está lejos de su mejor nivel. Es una realidad que puede verse semanalmente en Inglaterra y que queda reflejado en su rendimiento europeo esta temporada (4 de 9 puntos). Evidentemente, debemos ser objetivos. La clasificación del Valencia para Octavos de Final es complicada, deben darse una serie de resultados que confirmen el pase, pero las posibilidades son reales, están en las manos valencianistas, puede ocurrir. No es una quimera. No son algo inventado o ficticio. Y evidentemente, algo nada sencillo, pero existe la posibilidad. Y todo debe empezar esta próxima jornada, con una victoria (seguramente esperada) ante Young Boys en casa, ante su público. Eso sí, si frente a los suizos el Valencia es incapaz de sumar los 3 puntos estaría firmando su adiós al sueño de estar en el próximo sorteo de Champions League en diciembre y el objetivo (nada sencillo entonces, de no ganar al Young Boys) sería la tercera plaza para 'descender' a la recta final de la Europa League.


¿Puede el Valencia estar entre los 16 mejores equipos del viejo continente? Por supuesto. ¿Es sencillo? Seguramente no, pero queda vida, queda esperanza, quedan 3 jornadas para que en Mestalla sueñen fuerte, para que el Valencia recupere una confianza perdida y que en La Liga está siendo una preocupante tónica de resultados que a muchos ya quita el sueño, para mal.


Artículo realizado por Esteban Gómez (@mirondo9)