La Supercopa que hace sonreír a Tim Burton

Esta semana se estrena el nuevo formato de la Supercopa de España. Iré al grano. Un torneo que representa al fútbol español que no se disputa en España, que se disputa en un país de cuestionados valores sociales, que se trata de un invento institucional para sacar dinero y en el que 2 de los 4 equipos participantes no hicieron mérito alguno para poder estar presentes y, en consecuencia, poder ganarlo. Un disparate, en resumidas cuentas. Un disparate, claro, que sólo puede ocurrir en este país, pero eso son otros temas que no quiero tratar aquí.

Una Supercopa de España que se disputa en Arabia Saudí. ¿Por qué? En la RFEF deben saberlo muy bien porque ahí se ha cocinado todo. Es como vender bañadores y bikinis para esquiar, como vender chocolate caliente con churros en un chiringuito de playa en pleno de mes de agosto en la Malvarrosa valenciana, o como querer hacer funcionar un concesionario de barcos en los Pirineos. Pronto se activarán dos alertas: es surrealista y no tiene ni pies ni cabeza. Pero no. Esta Supercopa de España no se disputará en España.

Si uno se para a pensar en los valores sociales que transmite Arabia Saudí digamos que no se trata del país ideal para acoger un evento de enorme carácter social, de enorme potencial mediático, que atrae por igual a hombres y mujeres. Todo esto siendo (o intentando ser) honestos, intentando hacernos los tontos sin querer pensar que todo emite cierto aroma a negocio, a billetes recién impresos, a dinero fresco. El dinero silenciando la falta de ética y valores de un país que entremezcla el poder económico de la globalización con leyes sociales dignas de una sociedad de otro siglo. Lamentable.

Y luego, la guinda del pastel. Para mí, lo menos importante, ya que creo que tiene cierto toque de polémica barata. Pero, ¿qué sería el fútbol hoy en día sin polémica barata, sin su polémica de marca blanca? Polémica de Hacendado, que dirían algunos. Pero, ojo, pese a que sea una polémica creada a propósito para hablar de ello, no deja de ser verdad. Es una polémica impuesta para incendiar a los aficionados, pero verídica, tiene fundamento.

2 de los 4 clubes que participarán en esta Supercopa de España que se disputa en Arabia Saudí no hicieron ningún mérito para estar presentes en el torneo. Al menos cuando inició la pasada temporada, el punto de partida por el que se debía regir todo. El Barcelona ganó la pasada Liga en España y el Valencia ganó la pasada Copa del Rey. Pero, ¿qué hicieron Real Madrid y Atlético de Madrid para estar presentes en este torneo? Polémica, o no, es verdad. ¿Imagináis que queréis un coche, que conseguís el dinero para comprarlo y cuando vais a pagarlo os dicen que tenéis que pagar el doble sin motivo alguno? ¿Imagináis que en lugar de pagar más por ese coche en el concesionario os dicen que, por arte de magia, os tenéis que llevar dos y que si no lo hacéis os quedáis sin el dinero y sin el coche? Pues eso.

Esta Supercopa de España tiene buena pinta. Eso también es indudable. De repente, en un frío mes de enero, uno se encuentra, para empezar, dos partidos de altos vuelos como Valencia-Real Madrid y Barcelona-Atlético de Madrid, con una Final que será también muy atractiva. Y el formato no está mal. Imponer una Final Four, con varios partidos en apenas días, es atractivo, parece interesante. Se trata de un formato que ganará en interés social. Pero han fallado las formas, han fallado los contextos, han fallado las decisiones.

Ni debería disputarse en Arabia Saudí (y sí en España), ni deberían estar presentes Atlético de Madrid ni Real Madrid (no hicieron méritos), ni este formato debería estrenarse este año (y sí, seguramente, en 2021). El formato puede ser interesante, pero como suele hacerse todo en este país las formas fueron erróneas, reflejando cierta corriente social y política que parece estar ganando terreno en las calles.