Alexis Sánchez, otra 'víctima' del dorsal 7 en el Manchester United

Alexis Sánchez firmó en la recta final del mercado de fichajes por el Inter de Milán dejando el Manchester United tras una etapa repleta de dudas y lagunas. Un traspaso que, teniendo en cuenta las estadísticas de los últimos años, volvió a dejar claros síntomas de que lucir el dorsal 7 en las filas rojas de la ciudad de Manchester es una responsabilidad mayúscula. Jugadores recordados en la institución como George Best, Cantona o Beckham, son el claro ejemplo.

El jugador chileno era consciente. Cuando se confirmó su llegada a Old Trafford pronto comenzaron a salir dichas cifras, la relevante decisión histórica y todo lo que conllevaba aceptar el reto. Temporada y media después, con su salida ya confirmada hacia el fútbol italiano (donde ya jugó como futbolista de Udinese) vuelve a presentar sobre la mesa el serio reto de lucir el siempre exigente número 7 a las espaldas:



Cristiano Ronaldo (periodo 2003-2009)


El dorsal 7 no ha sido el mismo en las filas Red Devils desde su adiós. En Old Trafford marcó una época y está considerado el último jugador rindió en cifras mayúsculas con el histórico número de la institución inglesa. 118 goles en 292 encuentros sin ser delantero centro es la clara muestra de ello. La estrella portuguesa siempre tendrá al Manchester United en su memoria porque fue, seguramente, uno de los pasos más importantes de su carrera deportiva. Su fichaje, procedente del Sporting de Portugal, fue la primera gran decisión como jugador. Allí comenzó a escribir las primeras páginas doradas a nivel personal y colectivo. Su salida abrió, sin saberlo, una ausencia para el dorsal 7 que todavía muchos ansían cerrar porque querrá decir que el United tiene nueva estrella. 



Michael Owen (periodo 2009-2012)


Seguramente, a nivel goleador, el futbolista más determinante desde la salida del crack portugués. Michael Owen llegaba a Manchester tras etapas en Real Madrid y Newcastle, y no dejó un mal rendimiento en líneas generales con 17 goles en 53 partidos. Su rentabilidad goleadora no fue excesiva, pero se mantuvo en una dinámica positiva. Sobre todo al ser comparada con sus sucesores. Evidentemente, muy lejos de las cifras de Cristiano Ronaldo, pero algunos firmarían en los aledaños de Old Trafford algo similar a la etapa Red Devil de Owen hoy en día.



Antonio Valencia (periodo 2012-13)


Evidentemente, su rendimiento no pudo ser mayor que el del resto tratándose de un jugador que ya por aquel entonces tendía al aspecto defensivo. Su papel seguía siendo de extremo, pero sus participaciones no tuvieron tanta relevancia en metros finales. El jugador ecuatoriano sólo disputó una temporada con el dorsal 7, en la que jugó 40 partidos oficiales y marcó 1 gol.



Ángel Di María (periodo 2014-2015)


Llegó al fútbol inglés con el cartel de estrella mundial. Lo hizo procedente del Real Madrid y su fichaje volvía a ilusionar a la grada de Old Trafford. Pero las expectativas nunca se cumplieron y su andadura en la Premier League duró sólo un año antes de marcharse al PSG. Un balance pobre de 4 goles en 32 partidos fue lo que aportó el jugador argentino en el club inglés.



Memphis Depay (periodo 2015-2017)


Es el futbolista que más partidos ha disputado en el Manchester United con el dorsal desde la salida de Cristiano Ronaldo. Su fichaje no cumplió las expectativas creadas. Un futbolista que ahora ha recuperado en Francia el nivel que ya demostró en los Países Bajos, pero no fue así en Inglaterra, donde firmó una decepcionante etapa. 7 goles en 53 partidos, su balance deportivo en la institución de Manchester.



Alexis Sánchez (periodo 2018-2019)


El último que probó suerte en el Manchester United. El atacante chileno tomó la decisión de dejar el Arsenal y Manchester parecía su siguiente destino cuando todos los rumores le relacionaban a Manchester City, primero, y Manchester United, finalmente. Rendimiento muy por debajo teniendo en cuenta con 5 goles en 45 encuentros oficiales. Además, tenía en su poder el contrato más alto de la Premier League. Sus condiciones salariales fueron uno de los grandes incendios que irritaba a la afición, ya que su determinación deportiva nunca estuvo a la altura de lo que cobraba. Finalmente, tras un año y medio de dudas y decepciones puso rumbo a Italia, donde ahora buscará rendir notablemente en las filas del Inter de Milán.