Esteban Gómez nos recomienda dos pronósticos para el igualado derbi madrileño de la Internacional Champions Cup
Dirán que es amistoso, que se está exagerando con el cartel mediático del partido. Pero hay una realidad incontestable: es un derbi madrileño. Es evidente que no hay nada oficial en juego, que lo único puramente exigente es el orgullo de pertenencia a un territorio y la batalla vecinal de ganar al vecino. Un Real Madrid-Atlético siempre es un partido llamado a la exigencia, sea amistoso, sea oficial, sea en liga o a nivel europeo. Y la International Champions Cup ha elegido que se viva una nueva edición del derbi capital con tintes internacionales, a miles de kilómetros de sus raíces castizas allá por la Meseta ibérica.
Empate
Muchas veces he dicho que pensar en un empate como resultado final de un encuentro puede ser algo inesperado. Siempre se piensa que ganan unos y pierden otros. Todos aspiran a ganar, y en consecuencia otros son los que caen derrotados. Pero me parece interesante pensar en tablas para este derbi que estará lleno de jugadores de primer nivel. Un partido con morbo, que por muy amistoso veraniego que sea tendrá un factor orgullo y ego en juego que podría afectar a la concentración de los jugadores. Dos equipos muy potentes que aspiran esta temporada a hacer grandes cosas y, por ello, han empezado a formar proyectos sólidos a base de caras nuevas para que la carga de partidos afecte lo menos posible a nivel físico durante el paso de los meses. Es por ello que habrá una igualdad alta de potenciales, con jugadores capaces de marcar la diferencia en cada una de las líneas, con duelos muy interesantes. Personalmente, lo veo bastante igualado y por ello me parece interesante valorar la opción del empate.
Más de 2'5 goles
Uno se para a leer y ver los jugadores que están en ambas plantillas y pronto se crea un gusanillo especial en el estómago sabiendo que van a pasar cosas. Es un amistoso. Cierto. Pero la lógica llama a ver un encuentro con goles viendo las grandes estrellas que han viajado a las respectivas giras de Real Madrid y Atlético de Madrid. Además, precisamente por eso, por estar en verano. Los ajustes defensivos tienden a la ruptura, a la quiebra, a sufrir ciertas grietas. Es casi automático por pura normalidad. Es ahora cuando se ajusta todo, cuando se concretan los valores que se pondrán en juego durante los próximos meses. Si en este contexto sumamos a grandes estrellas mundiales sobre el césped no es descabellado pensar que es posible ver un partido de goles en este derbi veraniego que el destino ha tenido el capricho de preparar para que conocidos y extraños disfruten.