Jose Mourinho - No es fácil sobrevivir en la cima

Aseguran las voces sabias del lugar que es más fácil (o motivador) alcanzar el éxito que posteriormente mantener el nivel. Haciendo uso de un símil sencillo, aseguran que genera más motivación e ilusión intentar llegar a la cima, que luego mantenerse. Mientras escalas, ves la cima, tienes el objetivo de llegar, de subir, de sentirte allí arriba, de conseguir la meta. Sin embargo, luego la motivación tiende a bajar, porque el objetivo ya está cumplido. Las vistas desde allí arriba serán preciosas en el momento de la llegada, serán bonitas al día siguiente, pero seguramente al cabo de una semana la novedad dará paso a la rutina, a la normalidad, y esa relajación se convertirá en una caída del rendimiento.



Jose Mourinho es uno de los entrenadores más laureados de la historia del fútbol, pero sus exitosas etapas en Porto, Chelsea (sobre todo la primera) e Inter de Milán parecen cada vez más lejos, ya que sus etapas en Real Madrid, posterior vuelta a Stamford Bridge y, ahora, en Manchester United, no han estado a la altura de aquel técnico exitoso y dorado que consiguió reunir a millones de fans en todo el planeta.


Su etapa en Old Trafford ya se escribe en páginas grises de tonos oscuros, con más polémicas que éxitos, con más titulares extradeportivos que puramente futbolísticos. La figura de Mourinho vuelve a estar en entredicho, y muchas informaciones en las islas británicas ya hablan de la hipotética cantidad que costaría la salida del técnico portugués del Manchester United.


¿Se ha normalizado la figura de Mourinho? Sus resultados desde que llegó a Madrid, ¿le permiten seguir siendo considerado uno de los mejores entrenadores del mundo o, por el contrario, vive de sus doradas épocas pasadas? Probablemente, seguramente, sus resultados le dejan en mal lugar respecto a sus rivales en los banquillos, y sus cifras ahora en Manchester no le permiten, parece ser, seguir codéandose en los asientos más privilegiados del mundo del fútbol.


Mourinho siempre ha sabido manejar a la perfección la doble postura del entrenador que era capaz de crear vestuarios unidos de forma compacta y exitosos, cargándose a las espaldas toda la presión mediática, todos los focos. Incluso sus cuestionadas formas contra rivales y periodistas en ruedas de prensa tenían un argumento que le permitían maquillar todo: ganaba títulos. Sin embargo, ahora, sin trofeos, sin victorias, su figura encuentra un único y preocupante discurso: polémica por todos lados.


Cada vez menos defensores. Cada vez menos prestigio a nivel deportivo. Y evidentemente su imagen atraviesa una crisis que ensalza sus defectos por encima de unas virtudes que parecen a años luz, lejos, casi inalcanzables. Muchos aseguran que su etapa en Manchester está cerca de ser finalizada, o al menos con un horizonte que no va más allá de la presente temporada, como mucho. Es por ello que, parece, el técnico portugués vuelve a firmar un borrón en una trayectoria que era dorada, cercana a la excelencia, y que le vuelve a cuestionar las formas, las actitudes, sin dar la relevancia necesaria a lo puramente deportivo.


¿Hacia dónde va la figura de Jose Mourinho?


Artículo realizado por Esteban Gómez (@mirondo9)